Diferencia entre revisiones de «Discusión:Industria»

De Atlas Nacional de España
Saltar a: navegación, buscar
Línea 34: Línea 34:
 
</ul></div>
 
</ul></div>
  
La [https://dle.rae.es/?id=D6ME6wU desindustrialización] es, sin embargo, un fenómeno que, como en el resto de países desarrollados, también está ocurriendo en España. El peso de la industria como sector económico y, por tanto, incluyendo todo lo que se contempla en este tema, ha disminuido cinco puntos porcentuales entre 1995 y 2015, mientras que el sector servicios ha aumentado en ocho puntos porcentuales en el mismo periodo (hasta el 68%). No obstante, la separación entre industria y servicios es cada vez más difusa, pues los procesos de producción tienden a fragmentarse y muchas actividades que antes producían las manufacturas están ahora subcontratadas en el sector servicios, e incluso realizadas en el extranjero, procesos que se conocen como [https://www.significados.com/outsourcing/ ''outsourcing''] y ''offshoring'', respectivamente. Desde el punto de vista territorial, la [https://dle.rae.es/?id=D6ME6wU desindustrialización] desencadenó la crisis o el declive de ciertos espacios de tradición industrial, como la ría de Bilbao, el área central de Asturias, Sagunto, bahía de Cádiz o el Baix Llobregat en Cataluña, especializados en actividades industriales tradicionales (textil, siderurgia, construcción naval…) y, aunque el mapa industrial español no se ha modificado sustancialmente, desde el punto de vista laboral, el peso del empleo industrial sobre el total regional es mayor actualmente en Navarra, Aragón, La Rioja y País Vasco.
+
La [https://dle.rae.es/?id=D6ME6wU desindustrialización] es, sin embargo, un fenómeno que, como en el resto de países desarrollados, también está ocurriendo en España. El peso de la industria como sector económico y, por tanto, incluyendo todo lo que se contempla en este tema, ha disminuido cinco puntos porcentuales entre 1995 y 2015, mientras que el sector servicios ha aumentado en ocho puntos porcentuales en el mismo periodo (hasta el 68%). No obstante, la separación entre industria y servicios es cada vez más difusa, pues los procesos de producción tienden a fragmentarse y muchas actividades que antes producían las manufacturas están ahora subcontratadas en el sector servicios, e incluso realizadas en el extranjero, procesos que se conocen como [https://www.significados.com/outsourcing/ ''outsourcing''] y [https://www.economiasimple.net/glosario/offshoring ''offshoring''], respectivamente. Desde el punto de vista territorial, la [https://dle.rae.es/?id=D6ME6wU desindustrialización] desencadenó la crisis o el declive de ciertos espacios de tradición industrial, como la ría de Bilbao, el área central de Asturias, Sagunto, bahía de Cádiz o el Baix Llobregat en Cataluña, especializados en actividades industriales tradicionales (textil, siderurgia, construcción naval…) y, aunque el mapa industrial español no se ha modificado sustancialmente, desde el punto de vista laboral, el peso del empleo industrial sobre el total regional es mayor actualmente en Navarra, Aragón, La Rioja y País Vasco.
  
 
El gráfico ''[[:Archivo:Espana Evolucion-del-numero-de-empresas-en-la-industria-manufacturera 2008-2016 graficoestadistico 16057 spa.jpg|Evolución del número de empresas en la industria manufacturera]]'' muestra su sentido decreciente: entre 2008 y 2016 la cifra total pasa de 229.222 a 172.130 empresas, es decir, en ocho años disminuye el directorio en 57.092 empresas, un 24,9% menos, lo que se explica por la quiebra de empresas y su consiguiente cierre, siendo las pequeñas y medianas empresas las más afectadas; no obstante, hay que tener en cuenta que también está ocurriendo un proceso de fusión o integración entre empresas, que buscan ganar tamaño para ser más competitivas.
 
El gráfico ''[[:Archivo:Espana Evolucion-del-numero-de-empresas-en-la-industria-manufacturera 2008-2016 graficoestadistico 16057 spa.jpg|Evolución del número de empresas en la industria manufacturera]]'' muestra su sentido decreciente: entre 2008 y 2016 la cifra total pasa de 229.222 a 172.130 empresas, es decir, en ocho años disminuye el directorio en 57.092 empresas, un 24,9% menos, lo que se explica por la quiebra de empresas y su consiguiente cierre, siendo las pequeñas y medianas empresas las más afectadas; no obstante, hay que tener en cuenta que también está ocurriendo un proceso de fusión o integración entre empresas, que buscan ganar tamaño para ser más competitivas.

Revisión del 08:58 5 ago 2019


Estructura temática > Actividades productivas y económicas > Minería, energía, industria y construcción > Industria

  • Gráfico estadístico de evolución del número de empresas en la industria manufacturera. 2008-2016. España.
  • Mapa de evolución del número de empresas industriales. 2008-2016. España. PDF. Datos
  • Mapa de evolución del empleo en la industria. 2000-2015. España. PDF. Datos
  • Gráfico estadístico de evolución del empleo en la industria manufacturera. 2000-2015. España.

La industria ha desempeñado un papel determinante en el crecimiento económico y en el progreso social de los países. La primera y segunda revolución industrial representaron a lo largo de los siglos XIX y XX la más profunda transformación histórica de las estructuras productivas, sociales y territoriales en España. El cambio de una economía agraria y sociedad campesina a un país industrializado conllevó un intenso proceso de urbanización y la formación del actual sistema urbano, así como la especialización de los territorios (regiones y ciudades) en funciones productivas muy diversas y el desarrollo de una moderna red de transportes y comunicaciones que vertebra con eficacia el espacio peninsular. Aunque la modernización también tiene una vertiente sombría: los desequilibrios regionales y la desigualdad emergen como expresión de las contradicciones del capitalismo industrial y la globalización del sistema económico actual.

La cartografía y todos los recursos gráficos elaborados en este apartado se centran en la industria manufacturera. Corresponde al grupo C de la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE) 2009 y agrupa otros 24 subsectores, contenidos entre los códigos 10 y 33. Es preciso puntualizar que este grupo C incluye la rama industrial 19, coquerías y refino de petróleo, que en otras clasificaciones industriales, como la RAMI (Ramas Industriales) elaborada por el antes denominado Ministerio de Industria, Energía y Turismo (MINETUR) se contabiliza como rama energética, en lugar de industrial. Por tanto, aunque la información estadística utilizada se basa en la clasificación CNAE 2009 resulta inevitable hacer alusión en el texto al conjunto de la industria como sector económico con el fin de establecer un marco comparativo con los demás sectores.

La importancia de la industria manufacturera para la economía española es evidente: en 2015 empleó a más de 1,9 millones de trabajadores (el 10,8% del total del empleo nacional), generó una cifra de negocios de 407.502 millones de euros y su Producto Interior Bruto (PIB) representó el 12,9% del PIB nacional. Las actividades que forman parte del sector son muy diversas, y van desde la alimentación, bebidas y tabaco (26,2% del total de la cifra de negocios del subsector) y material de transporte (16,9%), hasta la industria textil, confección, cuero y calzado (3,5%). La industria en su conjunto, además, tiene una productividad laboral media superior a la de los otros sectores de la economía (hasta un 47% superior al sector servicios una vez excluido el inmobiliario). Se trata de una actividad clave en el sector exportador: casi un 30% de las ventas se destinaron al extranjero, dos tercios de las cuales fueron en la UE. En definitiva, la economía española dispone de un tejido industrial diverso, exportador y de productividad elevada.

  • Mapa de empresas industriales. 2016. España. PDF. Datos
  • Gráfico estadístico de distribución de empresas en la industria manufacturera por sectores. 2016. España.

La desindustrialización es, sin embargo, un fenómeno que, como en el resto de países desarrollados, también está ocurriendo en España. El peso de la industria como sector económico y, por tanto, incluyendo todo lo que se contempla en este tema, ha disminuido cinco puntos porcentuales entre 1995 y 2015, mientras que el sector servicios ha aumentado en ocho puntos porcentuales en el mismo periodo (hasta el 68%). No obstante, la separación entre industria y servicios es cada vez más difusa, pues los procesos de producción tienden a fragmentarse y muchas actividades que antes producían las manufacturas están ahora subcontratadas en el sector servicios, e incluso realizadas en el extranjero, procesos que se conocen como outsourcing y offshoring, respectivamente. Desde el punto de vista territorial, la desindustrialización desencadenó la crisis o el declive de ciertos espacios de tradición industrial, como la ría de Bilbao, el área central de Asturias, Sagunto, bahía de Cádiz o el Baix Llobregat en Cataluña, especializados en actividades industriales tradicionales (textil, siderurgia, construcción naval…) y, aunque el mapa industrial español no se ha modificado sustancialmente, desde el punto de vista laboral, el peso del empleo industrial sobre el total regional es mayor actualmente en Navarra, Aragón, La Rioja y País Vasco.

El gráfico Evolución del número de empresas en la industria manufacturera muestra su sentido decreciente: entre 2008 y 2016 la cifra total pasa de 229.222 a 172.130 empresas, es decir, en ocho años disminuye el directorio en 57.092 empresas, un 24,9% menos, lo que se explica por la quiebra de empresas y su consiguiente cierre, siendo las pequeñas y medianas empresas las más afectadas; no obstante, hay que tener en cuenta que también está ocurriendo un proceso de fusión o integración entre empresas, que buscan ganar tamaño para ser más competitivas.

La diversidad de la industria manufacturera española en 2016 se aprecia bien en el gráfico sobre la Distribución de empresas en la industria manufacturera por sectores y el mapa Empresas industriales: un total de 18 ramas de actividad, desde alimentación, bebidas y tabaco, pasando por cuero y calzado, metalurgia, química, hasta madera, muebles y materiales de transporte, con desigual peso específico pero dando cuenta de una variedad productiva que ayuda a reforzar la presencia en los mercados de un abundante número de manufacturas españolas. La diversidad sectorial o por ramas de manufacturas es mayor en las comunidades autónomas donde el número total de empresas también es más elevado: así se aprecia en los mapas cómo Cataluña, Comunitat Valenciana, Andalucía y Comunidad de Madrid ofrecen una notable variedad sectorial, aunque la importancia de unas ramas y otras es diferente: por ejemplo en Cataluña destaca la rama de los productos metálicos sobre el resto mientras que en Andalucía hay un equilibrio de este con la rama de alimentación. Si atendemos al componente territorial, la importancia numérica de las empresas ligadas a las manufacturas sobre el conjunto del tejido empresarial revela un pronunciado contraste, pues solo en el País Vasco, Navarra, La Rioja y Castilla-La Mancha se supera el 6,9%. Por el contrario, donde su peso relativo es menor es en las Islas Canarias, Illes Balears o Andalucía.



PIB en la industria manufacturera
Gráfico estadístico de evolución del Producto Interior Bruto en la industria manufacturera. 2000-2015. España.
  • Mapa de peso del Producto Interior Bruto industrial. 2014. España. PDF. Datos
  • Mapa de evolución del Producto Interior Bruto en la industria. 2000-2015. España. PDF. Datos

El Producto Interior Bruto (PIB) expresa el valor total de los bienes y servicios producidos en un país en un período de tiempo, normalmente un año. El volumen del PIB, expresado en millones de euros, permite establecer el tamaño de una economía y su evolución es indicativa de las etapas de expansión o retroceso de la misma, como ocurrió con el impacto de la crisis en España: en 2008 el PIB creció un 1,1%; entre 2009 y 2013 sus valores fueron negativos; y, desde 2014, el PIB nacional no deja de crecer, llegando al 3,2% en 2016. Por su parte, la contribución al PIB de la industria manufacturera expresa la importancia de esta rama de la producción frente al sector primario, el resto del sector secundario y los servicios.

En España, la industria manufacturera ha tenido una evolución negativa si comparamos el principio y el final de los quince años que van entre 2000 y 2015, pasando del 16,2% al 12,9% del PIB total.

Los contrastes territoriales son evidentes, destacando actualmente el peso del PIB de la industria en Burgos, Navarra, Álava y Gipuzkoa frente a la debilidad relativa del mismo en Extremadura, Madrid, Illes Balears y sur de Andalucía, entre otros.

Si atendemos al PIB industrial, sobresale la importancia de Cataluña, Comunidad de Madrid, Comunitat Valenciana y País Vasco, donde, no obstante, la evolución de este indicador es negativa desde el inicio de la crisis, como en el resto de las comunidades autónomas, si bien el balance del período 2000-2015 es positivo por la recuperación de los valores en los años recientes, como se refleja en la cartografía adjunta. Concretamente el mapa sobre Evolución del empleo en la industria manufacturera muestra entre 2000 y 2015 un desplome del volumen de efectivos, una pérdida que afecta sobremanera a las comunidades autónomas con más empleo en las manufacturas al inicio del período, pero que es general a todo el país. De hecho, el gráfico sobre este indicador referido al período 2000-2015 para el conjunto de España atestigua la tendencia decreciente del empleo en la industria manufacturera, que pasa de casi 2,9 millones de empleados a menos de dos millones en 2015, lo que representa una pérdida cifrada en casi una tercera parte del músculo laboral en este tipo de industria. Por su parte, el mapa que ilustra la Evolución del Producto Interior Bruto en la industria manufacturera expresa a las claras dos fenómenos de enorme importancia para comprender la dinámica de esta rama de actividad: primero, que la tendencia del PIB es a crecer entre 2000 y 2008 y sólo por efecto de la crisis financiera este indicador se contrae entre 2008 y 2013, para iniciar la remontada que lleva a un cambio de tendencia desde 2013 (el PIB tiene un comportamiento más positivo que el empleo y tiende a crecer por efecto de la mayor eficiencia de la industria en general y las manufacturas en particular); en segundo lugar, se comprueba que el empleo industrial retrocede no sólo debido a la crisis general de la economía, sino por una inercia relacionada con el impacto de las nuevas tecnologías, la robotización y la terciarización (menos empleo en las manufacturas, aunque más cualificado).

  • Gráfico estadístico de evolución de la cifra de negocios en la industria manufacturera. 2008-2014. España.
  • Mapa de evolución de la cifra de negocios en la industria. 2008-2014. España. PDF. Datos
  • Mapa de cifra de negocios en la industria. 2014. España. PDF. Datos
  • Gráfico estadístico de distribución de la cifra de negocios en la industria manufacturera por sectores. 2014. España.

El gráfico Evolución de la cifra de negocios en la industria manufacturera ilustra una caída importante entre 2008 y 2009, si bien la recuperación tiende a estabilizar este indicador en los 407 mil millones de euros en 2014. Por ramas, el gráfico Distribución de la cifra de negocios en la industria manufacturera por sectores muestra el protagonismo o fuerte peso específico en 2014 de alimentación, bebidas y tabaco, metalurgia, material de transportes y química.

Por su parte, la revolución neotecnológica, basada en las TIC (Tecnologías de la Información y el Conocimiento), supone un verdadero desafío para el sector, con efectos visibles en el territorio. Con respecto a lo primero, la industria, como otros sectores económicos, se halla inmersa en una profunda metamorfosis debido a fenómenos emergentes como la digitalización de los procesos productivos, el desarrollo de la inteligencia artificial, la robotización, las posibilidades de producción asociadas a la impresión 3D o la explotación del big data. Todos estos avances dan lugar a lo que se conoce como Industria 4.0 y conllevan un profundo cambio en el perfil de los profesionales que trabajan en el sector: si en su origen la industria ocupó a trabajadores provenientes del sector agrícola sin que precisaran de mucha formación, ahora los ocupados tienen un nivel educativo más elevado y en las empresas se impone la formación continua, indispensable para aprovechar al máximo las oportunidades que las nuevas tecnologías ofrecen y para añadir valor a las manufacturas. Por su parte, las tareas más mecánicas o repetitivas, que solían ser desarrolladas por trabajadores poco cualificados y con salarios bajos, están siendo sustituidas por robots o procesos mecanizados, lo que repercute en la organización del trabajo en la fábrica.

Los cambios ligados a las nuevas tecnologías afectan también a los factores de localización y desarrollo urbanístico de las áreas empresariales: los polígonos industriales tradicionales, que se ubican a lo largo de las principales vías de acceso a las ciudades y aglomeraciones urbanas, deben convivir con parques tecnológicos y científicos, espacios empresariales y de investigación de cuidado diseño urbanístico, edificios de moderna arquitectura y con accesibilidad óptima a centros de investigación y enseñanza superior. Los empleados de estos nuevos espacios industriales son, en un alto porcentaje, ingenieros y expertos en nuevas tecnologías y las empresas instaladas deben dedicar una parte de su actividad al I+D+i con el propósito añadido de llegar a constituir un verdadero medio innovador, lo que requiere de un proceso también nuevo: la transferencia de conocimiento.


Parques científicos y tecnológicos
Mapa de parques científicos y tecnológicos. 2017. España. PDF. Datos

Son espacios para empresas basadas en la innovación y el conocimiento. En España surgen en los años ochenta y la mayoría son de promoción pública. Su objetivo es favorecer la integración entre ciencia, tecnología e industria. Ofrecen tipologías urbanísticas, constructivas y paisajísticas muy diversas y suman más de 3.000 ha de superficie. Una tercera parte de los 69 parques españoles tiene un tamaño superior a 100 ha; un 20% son espacios de menos de 5 ha y el resto tiene entre 5 y 50 ha. En su localización es fundamental la proximidad y óptima accesibilidad a una ciudad o aglomeración urbana dinámica y a centros de investigación. En los parques científicos hay actividades de I+D y de formación, quedando excluida la producción. Los parques tecnológicos combinan I+D+i con actividades de fabricación. Pueden interpretarse como los espacios industriales del futuro.

Para impulsar la recuperación de la industria tras la crisis reciente es necesario asimismo un compromiso por parte de los responsables públicos, que se traduce en una política industrial orientada a que el sector aumente su contribución al PIB y a la creación de empleo, pero también al logro de una mayor competitividad y desarrollo de la innovación. El instrumento para alcanzar estos objetivos es la Agenda para el fortalecimiento del sector industrial en España, un plan de acción con propuestas concretas que desde 2014 trata de impulsar el crecimiento del Valor Añadido Bruto industrial, la creación de empleo y la mejora de la posición competitiva del tejido industrial español, al tiempo que sienta las bases para que, en el medio plazo, el sector se adapte a los nuevos retos globales y a los cambios que ya se están produciendo como resultado de la transición digital en el conjunto de la economía, creando nuevas oportunidades de negocio y utilizando el poder transformador de la tecnología para aumentar la competitividad y productividad del tejido industrial. Dicha Agenda contempla diez líneas de actuación:

  1. Estimular la demanda de bienes industriales con efecto multiplicador en la economía.
  2. Mejorar la competitividad de los factores productivos clave.
  3. Asegurar un suministro energético estable, competitivo y sostenible dentro de la UE.
  4. Reforzar la estabilidad y uniformidad del marco regulatorio español.
  5. Incrementar la eficiencia y la orientación al mercado y a los retos de la sociedad de la I+D+i.
  6. Apoyar el crecimiento y la profesionalización de las PYME españolas.
  7. Adaptar el modelo educativo a las necesidades de las empresas.
  8. Aumentar el peso de la financiación no convencional en las empresas industriales.
  9. Apoyar la internacionalización de las empresas industriales y la diversificación de mercados.
  10. Orientar la capacidad de influencia de España a la defensa de sus intereses industriales.


AUTORES.jpg
Texto: Paz Benito del Pozo. Véase la lista de participantes


↑ Arriba


BAJADA-01.jpg

En la página Libros Digitales del ANE puedes descargar la obra completa España en mapas. Una síntesis geográfica.