Diferencia entre revisiones de «Archivo:Espana Comercio-y-finanzas-durante-el-siglo-XVI 1500-1599 mapa 15262 spa.jpg»
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Autor | Atlas Nacional de España (ANE) |
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Anchura | 1555 px |
Altura | 1141 px |
Bits por componente |
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Composición de pixel | RGB |
Orientación | Normal |
Número de componentes | 3 |
Resolución horizontal | 150 ppp |
Resolución vertical | 150 ppp |
Software usado | Adobe Photoshop CS5 Windows |
Fecha y hora de modificación del archivo | 15:33 7 mar 2019 |
Versión de Exif | 2.21 |
Comentarios de usuario | El comercio de la MonarquÃa hispánica durante el siglo XVI no fue una actividad económica excesivamente dinámica ni bien organizada. En la vertiente interior el principal problema con el que contó fue la deficiente circulación de los productos, a pesar de la presencia de la “Real Cabaña de Carreterosâ€. En cuanto al comercio exterior, el mayor inconveniente residió en que la MonarquÃa exportaba algunas –importantes- materias primas, e importaba gran cantidad de productos manufacturados, con lo que la balanza entre unas y otros solÃa ser negativa. Este modelo comercial estaba organizado a través de una serie de instituciones, como fueron los Consulados o la Casa de Contratación de Sevilla, y de un sistema financiero y económico que proporcionaba el soporte necesario para estos negocios. En este sentido, las acuñaciones de moneda estuvieron controladas por diferentes “Casas de Moneda†(las “cecasâ€), destacando la fundación en 1582 de la de Segovia. En cuanto a los Consulados, durante el siglo XVI se pude rastrear la existencia de tres: Burgos, Bilbao y Sevilla. La fundación del Consulado de Burgos se produjo en 1494 y controlaba el comercio de exportación de lana hacia Flandes por los puertos del Cantábrico, especialmente por Bilbao. Por ello, en 1511 Bilbao logró conformar un Consulado propio para poder competir con el de Burgos, aunque la ciudad castellana buscase el amparo de otros puertos, como Laredo y Santander, sin demasiado éxito. A imitación de estos dos Consulados, la ciudad de Sevilla creo el suyo en 1543, con la intención de participar en la organización de las flotas a Indias. Concretamente, este fue otro de los puntos principales del comercio de la MonarquÃa, pues tras el descubrimiento de las Indias se generó un fructÃfero tráfico de importaciones y exportaciones entre la PenÃnsula y los nuevos territorios. En 1503, se creó la Casa de Contratación de Indias en Sevilla, que adquirirÃa el monopolio sobre este tráfico comercial a partir de 1573. Sin embargo, entre 1529 y 1573, a partir de una ordenanza real de Carlos V, se abrió el comercio con las Indias a los puertos de La Coruña, Bayona, Avilés, Laredo, Bilbao, San Sebastián, Cartagena, Málaga y Cádiz. Concretamente en Cádiz, también se fundó en 1535 el Juzgado de Indias, que generó una fuerte rivalidad con Sevilla. Las importaciones desde las Indias proporcionaron a la Corona importantes cantidades de oro y plata, que sirvieron para costear la polÃtica europea de una MonarquÃa en plena expansión. Hasta mediados del siglo XVI las remesas más copiosas fueron las del oro, pero desde 1550 en adelante la plata fue el principal metal precioso que llegó a la PenÃnsula. Todas estas instituciones necesitaron de un entramado bancario y financiero que respaldase sus actuaciones. Hasta 1551 las instituciones bancarias nacionales mantuvieron un cierto auge, que finalizó por las consecuencias de la polÃtica de la MonarquÃa, los problemas en Flandes o la disminución de la llegada del oro de las Indias. Por ello, a finales del siglo XVI, solo tenÃan una cierta relevancia el Banco de Sevilla controlado por la familia Espinosa, el de Madrid controlado por los genoveses, las tablas de cambio de Barcelona y Valencia y, en menor medida, la tabla de Zaragoza. Junto a este sistema bancario, la polÃtica imperial de la MonarquÃa provocó la necesidad de contar con banqueros tanto nacionales como alemanes, flamencos y genoveses. Durante el reinado de Carlos V los banqueros nacionales relacionados con el tráfico castellano de Burgos y Sevilla y los Függer alemanes ocuparon este espacio. Pero entre 1557 y 1627 los banqueros genoveses fueron los que tuvieron una mayor participación en el modelo financiero español, debido a su capacidad para otorgar asientos al rey. El modelo de asientos consistÃa en que estos hombres de negocios pagaban en ciertas plazas financieras o ferias unas cantidades de dinero por adelantado para cubrir las necesidades de la MonarquÃa. Las principales ferias fueron las de Medina de Rioseco, Villalón y Medina del Campo. En concreto, las ferias de Medina del Campo fueron las que acabaron eclipsando a las demás y se introdujeron en el circuito europeo. Todas ellas contaron con problemas en la segunda mitad del siglo XVI. A cambio de sus asientos, los banqueros cobraban en oro o plata la cantidad correspondiente al préstamo realizado. Pero, en los momentos en los que se prohibió la extracción de metales preciosos, solo podÃan cobrar sus anticipos a través de materias primas (especialmente lana), en un proceso en el que también intervenÃan los hombres de negocios castellanos, como la familia Ruiz de Medina del Campo. Además, a partir del reinado de Felipe II, también se hizo frecuente que la Corona pagase a los banqueros mediante deuda consolidada, es decir mediante juros. Todo este modelo financiero fue esencial, tanto para costear la polÃtica de la MonarquÃa como para facilitar el sistema comercial exterior e interior. Por tanto, el siglo XVI fue un momento crucial para el establecimiento del modelo comercial y financiero de la MonarquÃa. Sin embargo, la eficiencia de este sistema fue decayendo a medida que avanzaba el siglo, según disminuÃan las remesas de metales de Indias y crecÃan los compromisos internacionales de la Corona. Con la llegada del siglo XVII, el comercio y las finanzas españolas mantuvieron las estructuras básicas establecidas hasta ese momento, aunque progresivamente se fueron produciendo algunas modificaciones inherentes a los nuevos compromisos de la MonarquÃa. |
Espacio de color | Sin calibrar |
Fecha y hora de la digitalización | 09:16 30 may 2018 |
Fecha en la cual fueron modificados por última vez los metadatos | 16:33 7 mar 2019 |
Id. único del documento original | uuid:742caab3-5ab9-48c7-8d0b-ffbe36a63e35 |
Título breve |
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Palabras clave | comercio en la edad moderna |
Versión IIM | 7959 |