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Discusión:Geomorfología

1028 bytes añadidos, 13:04 23 may 2023
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'''''a) Granítico.''''' El granito es un material rígido y resistente, pero al mismo tiempo susceptible de fragmentarse y sensible a la alteración por meteorización. Los principales factores que intervienen en este modelado son: cambios químico-mineralógicos, variaciones texturales y presencia de discontinuidades o fisuras. De la conjunción de dichos factores, destacan las siguientes formas:
''• Formas prismáticas y en domo.'' Relieves de aspecto monolítico y paredes verticales (''[[:Archivo:Madrid_Modelado-granitico.-Domo-granitico-en-la-sierra-de-la-Cabrera-(Madrid)_2013_imagen_16766_spa.jpg|foto 4'']]). A sus pies se pueden encontrar grandes acumulaciones de bloques.
''• Berrocales.'' Tienen lugar cuando la red de diaclasas es ortogonal y las condiciones climáticas moderadas. Constituyen paisajes caóticos de perfiles redondeados, con alveolos o pasillos de arenización y caos de bloques, bolos o tors.
'''''b) Kárstico.''''' El modelado kárstico se origina por procesos de erosión por disolución. Aunque predomina sobre rocas calizas, también existen en otras rocas como yesos (karst de Sorbas, Almería). Las formas kársticas pertenecen al exokarts (superficiales) o al endokarst (subterráneas), y se clasifican según sean de absorción, conducción o emisión.
''• De absorción'': Hay numerosas formaciones como lapiaces o lenares entre los que se distinguen varios tipos según su forma, lugar de formación o tamaño; dolinas, las formas más típicas que crean depresiones cerradas, de dimensiones y profundidades variables (''[[:Archivo:Malaga_Modelado-exokarstico.-Dolina-en-la-sierra-de-las-Nieves-(Malaga)_2013_imagen_17250_spa.jpg|foto 5'']]) y de cuya unión se forman las uvalas; poljé, que constituyen extensas llanuras, y cuya presencia indica un estado avanzado del karst; cañones, gargantas u hoces, que deben su formación a la incisión fluvial y a fallas.
''• De conducción'': están condicionadas por la fracturación, planos de estratificación, y presencia de niveles impermeables: simas, grutas y cavernas (''[[:Archivo:Leon_Modelado-endokarstico.-Cuevas-de-Valporquero-(Leon)_2013_imagen_17251_spa.jpg|foto 6'']]) son las más características.
''• De emisión'': pueden ser surgencias en las que la alimentación procede del área karstificada, y resurgencias, en las que las aguas no proceden del karst pero han entrado en él.
'''''c) Volcánico.''''' Las formas de relieve de áreas volcánicas son fruto de la irrupción de materiales procedentes del magma y dan lugar a paisajes cambiantes al ser rocas recientes. Canarias es el territorio volcánico por excelencia, si bien son también reconocidos otros paisajes volcánicos como los de Olot, sudeste de España (Cabo de Gata), Campo de Calatrava, o islas Columbretes (ver mapa de ''[[:Archivo:Espana Areas-volcanicas-de-la-Espana-peninsular 2016 mapa 15812 spa.jpg|Áreas volcánicas de la España peninsular]]'').
A los relieves de formas cónicas, se les unen extensas coladas de lava y campos de piroclastos como lapilli y cenizas volcánicas. Las formas más destacadas son los conos de piroclastos, pero también son importantes las calderas volcánicas, algunas fruto del hundimiento de la cámara magmática (''[[:Archivo:Islas-Canarias_Modelado-volcanico.-Parque-Nacional-del-Teide-(Tenerife)_2013_imagen_17253_spa.jpg|Las Cañadas del Teide, foto 7]]'').
Las coladas de lava se clasifican en: Aa o malpaís (de aspecto escoriáceo) y pahoehoe (lavas fluidas que dan lugar a lavas cordadas). La composición de la lava determina la forma del paisaje después de la erupción. Los campos de piroclastos suelen cubrir grandes extensiones que forman superficies regulares, lo que contrasta con los diques que la erosión diferencial deja en resalte y los hace hitos muy reconocidos.
'''''d) En rocas blandas.''''' En las depresiones arcilloso-margosas fáciles de erosionar, en condiciones climáticas áridas y semiáridas, con escasa cubierta vegetal, las precipitaciones de alta intensidad han modelado un paisaje muy particular de surcos, cárcavas y barrancos, denominado badlands. Este tipo de formaciones son típicas de las depresiones y cuencas terciarias intrabéticas y pirenaicas y algunas de estas áreas han sido declaradas de interés singular, como es el paraje de Barrancos de Gebas en Murcia (''[[:Archivo:Murcia_Modelado-en-margas.-Badland-en-Barrancos-de-Gebas-(Murcia)_2013_imagen_17254_spa.jpg|foto 8]]''). En donde se dan las condiciones favorables (depresión del Ebro o cuencas neógenas de Murcia), son frecuentes los procesos de erosión subsuperficial denominados piping.<br /><br /><br /><br />
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En la actualidad, la actividad glaciar es mínima y en retroceso, consecuencia del calentamiento global, si bien la presencia de glaciares durante el último millón de años queda patente en las grandes montañas españolas. Los glaciares en España se han reducido a lo largo del Holoceno con un repunte en la Pequeña Edad de Hielo (siglos XIV a XIX). Hoy ocupan una superficie insignificante. De 1984 a 1993 los glaciares activos en el Pirineo se redujeron de 1.800 a 468 ha, y en 2012 sólo existían 10 glaciares y 8 heleros, con una extensión 160 ha.
Entre las formas glaciares destacan: valles en U, valles colgados, lagos, circos glaciares y grandes aristas. También se dan formas sedimentarias como morrenas. Valles glaciares y circos son las formas más fáciles de reconocer, especialmente en el Pirineo (''[[:Archivo:Huesca_Modelado-glaciar.-Valle-glaciar-en-Aguas-Tuertas-(Huesca)_2013_imagen_17257_spa.jpg|foto 9]]'').
Las formas periglaciares, como suelos poligonales (''[[:Archivo:Peninsula-Iberica--zona-noreste_Modelado-periglaciar.-Poligonos-de-piedras-en-el-Pirineo-aragones_2013_imagen_17258_spa.jpg|foto 10]]''), terracillas, senderos de vacas, derrubios estratificados, glaciares rocosos y canchales son fruto también de la acción del hielo en el suelo. Formas periglaciares espectaculares aparecen en las cumbres pirenaicas y béticas, o en los altiplanos y cumbres de las cordilleras Ibérica y Cantábrica.
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Los ríos ejercen un trabajo geomorfológico intenso y constante, arrancando, acarreando y sedimentando materiales. En España, los contrastes climáticos ofrecen paisajes fluviales contrastados como ramblas en el sudeste o arroyos en Pirineos. Los tramos altos de los cauces suministran los materiales, los tramos medios los transfieren, y en los tramos bajos se forman los grandes edificios sedimentarios.
Las formas fluviales erosivas más abundantes son gargantas (hoces del Duratón o desfiladero de los Gaitanes), cascadas (nacimiento del río Mundo) o meandros. En los lechos de los ríos se encuentran pilancones o marmitas de gigante modelados por la abrasión de los materiales arrastrados en el fondo de las corrientes. Las formas fluviales sedimentarias, por su extensión, son más llamativas, pues terrazas y llanuras ocupan grandes espacios en los tramos bajos de los ríos (''[[:Archivo:Huesca_Modelado-fluvial.-Terraza-fluvial-en-el-rio-Esera-(Huesca)_2013_imagen_16768_spa.jpg|foto 11]]''). En los tramos finales, en contacto con el mar, las formas características son deltas y estuarios (delta de l’Ebre).
En España las formas fluviales actuales son, más que nunca, el resultado de la acción de la naturaleza y la actividad humana: cambios en los cauces, abandono de áreas de montaña, construcción de embalses…
El modelado eólico más representativo, los sistemas dunares, en España están asociados a las costas tanto peninsulares como insulares. En la costa cantábrica y Galicia se encuentran ligados al aporte de ríos o bien sobre las barreras arenosas confinantes de los estuarios (El Puntal en Laredo, San Vicente de la Barquera, Oyambre...), también presentes en las rías Baixas y Altas (Cedeira, Corrubedo, Samil...). Con diferentes grados de fijación por la vegetación, en la costa atlántica andaluza se encuentran sistemas dunares más amplios asociados a formaciones litorales (El Rompido, Punta Umbría, mantos eólicos de El Abalario…), aportes de sedimentos por la deriva litoral (dunas móviles de Doñana) o la persistencia de los vientos de levante (dunas móviles de Bolonia o Valdevaqueros).
En la costa mediterránea, a pesar de la intensa presión antrópica, aún se encuentran formaciones dunares en las desembocaduras de ríos y ramblas (Guadiaro, Andarax, Segura…), deltas (Ebro, Llobregat...) y ensenadas (Davesa del Saler, Empordà...). En las costas insulares se asocian puntualmente a bahías y ensenadas, si bien en las islas Canarias orientales se localizan campos dunares muy bien desarrollados (Jandía, Corralejo, El Jable, Maspalomas...) (''[[:Archivo:Islas-Canarias_Modelado-eolico.-Dunas-de-Maspalomas-(Gran-Canaria)_2013_imagen_17259_spa.jpg|foto 12]]''). Deposiciones antiguas de la línea de costa son las dunas fósiles o relictas pleistocenas (eolianitas).
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